El sitio es un complejo de turberas altas y turberas de transición que abarca más de cien lagos y pequeñas islas de suelo rico en minerales cubiertas de bosques de árboles de hoja pequeña y de píceas. En 2016, se modificaron los límites del sitio Ramsar para hacerlos coincidir con los de la reserva paisajística llamada Yelnia Republican Landscape Reserve, lo que conllevó el aumento de su extensión en 2.100 hectáreas. El sitio contiene una de las turberas altas más grandes de Europa, que también es representativa de las turberas seminaturales del Distrito de los Lagos de Belarús. El sitio contiene hábitats esenciales para varias especies con poco rango de tolerancia ambiental asociadas a las turberas altas y también es importante para varias especies de flora y fauna relictas de épocas glaciales. La extensa turbera y las tierras agrícolas vecinas constituyen importantes lugares de descanso y alimentación para más de 20.000 aves acuáticas migratorias, entre las que figuran más del 1 % de la población biogeográfica de la grulla común (Grus grus) y el ánsar careto (Anser albifrons), amenazado a escala mundial. Más de 15 ríos nacen en el sitio, que ejerce una influencia significativa sobre el régimen hidrológico y el microclima de la región y sirve de biofiltro de contaminantes antropogénicos. Gracias a su inaccesibilidad, las actividades humanas se limitan a la recolección de bayas, la pesca con caña y la caza y también la silvicultura en la periferia. Hay un centro de visitantes, un sendero ecológico y una torre de observación y se organizan visitas guiadas y excursiones individuales y en grupo. Se ha preparado un plan de gestión y se han aplicado las medidas prioritarias; por ejemplo, aunque el drenaje de la turbera y las zonas colindantes había perturbado el régimen hidrológico, tras los trabajos de restauración ha aumentado la distribución de musgo esfagnáceo en todo el sitio.