El sitio abarca las partes inferiores y la desembocadura del río Fylleån, en la costa occidental del país. Prácticamente no ha sido modificado por intervenciones hidrológicas y sus aguas son de buena calidad. Posee comunidades vegetales interesantes, que habitan en antiguos meandros, meandros abandonados invadidos por la vegetación y humedales inundados periódicamente, y también en los paisajes de dunas bien conservados en el litoral. El río es muy valorado, ya que es un lugar de desove para el salmón del Atlántico (Salmo salar) y la trucha común (Salmo trutta), incluidos en la lista roja nacional. También alberga una fauna bentónica diversa. Un humedal construido cerca del mar es un lugar de descanso para las aves y también un importante lugar de reproducción para las aves, tales como el pájaro moscón europeo (Remiz pendulinus), que está en peligro a escala nacional, y el charrancito común (Sternula albifrons), vulnerable en Suecia. Los pedregales costeros contienen tumbas de principios de la Edad de Hierro escandinava y en la zona hay muchos restos arqueológicos y culturales antiguos. La zona es muy valorada para el recreo y el turismo por su hermoso paisaje abierto y su naturaleza diversa. Las principales amenazas para el sitio están relacionadas con la tala de árboles y la extracción de madera, la pesca, la regulación hídrica y la gestión del agua. En el sitio hay tres pequeñas estaciones hidroeléctricas. Aunque todas cuentan con escaleras para peces, constituyen barreras para los peces y otros organismos y también para el transporte de los sedimentos y pueden afectar al flujo hídrico.