Este sitio es una zona excepcional de turberas de tierras bajas que posee una gran variedad de hábitats y características paisajísticas, como montañas, rocas expuestas y pedregales, turberas, brezales secos, húmedos y alpinos, praderas de tierras altas, praderas húmedas, ríos, lagos, matorrales y bosques. Sus ríos y lagos conectan el sitio con el río Gweebarra y la bahía de Gweebarra. En estos hábitats se reproducen el chorlitejo dorado común (Pluvialis apricaria) y el lagópodo escocés (Lagopus lagopus scotica), y se alimentan el esmerejón (Falco columbarius), el halcón peregrino (Falco peregrinus) y el águila real (Aquila chrysaetos). Hay presencia de nutrias que probablemente se alimentan en los lagos, ríos y arroyos. El sitio se utiliza para la recreación y favorece el ciclo de nutrientes, la formación de suelo y la polinización. En el Parque Nacional en donde se sitúa el sitio hay presencia de Rododendro ponticum, lo que supone una amenaza para las turberas y los bosques adyacentes, ya que podría propagarse en estos hábitats.