Este sitio contiene la charca permanente de agua dulce más grande de las Bermudas y una ancha franja de marismas en su extremo septentrional. La biota de la charca es limitada, probablemente debido a una combinación de temperaturas elevadas del agua en verano, sedimentos orgánicos inestables, escorrentía de nutrientes de las tierras circundantes y sedimentación gradual. No obstante, alberga una población importante a escala internacional de la especie endémica y amenazada de pez Fundulus bermudae, que está adaptada al agua dulce y se ha utilizado para poblar otras dos charcas en las Bermudas. El sitio también contiene una subpoblación importante de la ciperácea Carex bermudiana, que es endémica y está en peligro, y varios ejemplares supervivientes de la sabina Juniperus bermudiana, que es endémica y está en peligro crítico. También destaca por ser la zona de bajos de lodo más importante para las aves limícolas que están de paso por las Bermudas y es un lugar importante para aves acuáticas residentes y migratorias. Warwick Pond es un lugar importante para el recreo y la educación, y la ONG Bermuda National Trust mantiene un sendero de naturaleza con paneles informativos. La contaminación por la escorrentía de aguas superficiales es una preocupación importante, junto con la invasión gradual de los bajos de lodo por la vegetación. Las plantas invasoras también son una amenaza para los esfuerzos de reforestación con plantas autóctonas y endémicas.