Ånnsjön es un gran lago de agua dulce pobre en nutrientes que está rodeado de extensas turberas. El sitio comprende marismas, una cresta arenosa, zonas erosionadas de turba y cascadas espectaculares. Los deltas continentales poco comunes ubicados en las orillas occidental y noroccidental del lago son valiosos lugares para la conservación y la educación. Las turberas que rodean el lago son buenos ejemplos de turberas de influencia marítima. Hay una mezcla de tipos de turberas con una flora diversa. Ånnsjön es muy importante para las aves de humedal migratorias y reproductoras tales como el ánade rabudo (Anas acuta), el escribano palustre (Emberiza schoeniclus) y el combatiente (Philomachus pugnax), que son vulnerables a escala nacional. En el sitio hay dos santuarios con acceso público restringido en determinadas épocas del año. En la pendiente pronunciada de la turbera de Klockamyren que está cerca del lago hay dos capas de troncos de pinos de 4.600 y 6.100 años de edad respectivamente que indican que en el pasado la zona estaba cubierta de árboles. El sitio proporciona forraje para la cría de renos por el pueblo indígena Sami. También tiene algún valor para controlar las inundaciones y se utiliza para la caza, la pesca y la recolección de camemoros o bayas árticas. Ånnsjön es un lugar popular para la observación de aves, particularmente en primavera y verano. El sitio cuenta con instalaciones para los visitantes tales como senderos, pasarelas y observatorios como torres y hides para contemplar las aves.